El temor a lo que pueda pasar, a abrirnos paso entre ese montón de momentos, etapas, errores, que se acumulan delante nuestra para hacerse oír. El temor a darte cuenta de que hay cosas que ya no están. El temor a pensar que nada dura siempre. El temor a saber que todo en lo que creías firmemente, en lo que confiabas que no iba a fallar se esté desmoronando. El temor a echar de menos todo eso.
O más bien, el miedo de ser consciente de que ya lo perdiste.
No hay comentarios:
Publicar un comentario